• Dándole la espalda a la genética.

























- Pero...¡esa pose es mía!
- No, yo la vi primero en mi otra vida.

2 comentarios:

veocucarachas dijo...

Es emocionante pasar por acá siempre, y encontrarse con estas cosas que a uno siempre lo sorprenden.
Te admiro mucho esa mirada que tanto encuentra todo el tiempo. Esta foto, también la de la chica corriendo encima y esos textos, no se.

Tenés un universo maravilloso de hacer las cosas!

Beso grande!

Dieguez

María •• dijo...

Dieguez! Pero que sorpresa su huella por estos pagos!

Y que bueno que la huella sea su sorpresa!

No encuentro más que palabras de sonrisas y gracias por formar parte de la emoción esa.

Y el universo ya es demasiado maravilloso de por sí, como para no andar buceándolo.

Eso sí, para eso es necesario una escafandra de onomatopeyas...

Abrazo!